En primer lugar la anomia que nos
muestra Merton señala que es una condición social, de la cual hay una
discrepancia entre los fines cultures y el acceso que determinadas personas
tienen medios legítimos, es decir, es una condición social donde existen
objetivos que la sociedad debe alcanzar, sin embargo los recursos y las maneras
de llegar a dichas metas no está equitativo a nivel social, por lo que habrán
caminos ilegítimos para alcanzar dichos objetivos.
Según Merton, en la clase social
alta existe una anomia de éxito que surge a causa de los éxitos que obtienen
personas de dicho grupo, además las expectativas son altas debido a la posición
en la que se encuentran, esto por consecuencia fomenta aspiraciones cada vez más
elevadas.
Lo que podría ocurrir es que los deseos de esta naturaleza puedan
ser insaciables.
Algunos ejemplos en relación a esta anomia de existo podría ser quien tiene un mejor auto, mejor casa, más dinero, más poder, etc.
Algunos ejemplos en relación a esta anomia de existo podría ser quien tiene un mejor auto, mejor casa, más dinero, más poder, etc.
Además Merton realiza una tipología
que establece tipos de conductas en relación a la anomia, los cuales son:
A fin de explicar los delitos de
cuello blanco, desde este autor se trataría de una desviación innovadora, ya
que buscan un camino ilegitimo para conseguir dichas metas.
Desde otra perspectiva estos
tipos de delincuentes pueden sugerir que no han internalizado las normas
institucionales a través de las cuales se determinan pautas de comportamiento
moral y los medios para alcanzar los fines culturales
El historiador británico. R.H.
Tawneye expresó de gran manera esta condición social:
A los fuertes le prometieron una
libertad sin límites para el ejercicio de su fuerza, a los débiles, la
esperanza de que también ellos podrían llegar a ser fuertes algún día. Ante los
ojos de cada uno de ellos hicieron
pender un premio de oro, que no todos podían alcanzar, pero por el que todos debían
luchar: la encantadora visión de una infinita ampliación. Aseguraron a los
hombres que no había otros fines que los propios, no había otra ley que su deseo,
ni otro limite distinto del que consideran recomendable. A continuación, ellos
convirtieron a la persona en el centro de su universo
No hay comentarios:
Publicar un comentario